Todo parece indicar que al final, las tres principales fuerzas políticas en el Congreso, PAN, PRI y PRD cederán ante las televisoras y las estaciones de radio al eliminar del proyecto de la nueva legislación electoral, la posibilidad de sancionar con la suspensión de sus transmisiones a aquellos medios que transmitan propaganda “negra” (ilegal) en contra de algún partido político o candidato.
Esto nos deja donde estábamos en un inicio, con la posibilidad de que cualquier persona, organismo o partido pueda atacar de manera directa a su opositor. El argumento, que el público no se quede sin ver el futbol o las telenovelas. Nada más ridículo y superficial como eso.
Esta era la única forma en que las empresas de comunicación verificaran la calidad de la publicidad electoral y protegieran, a su vez, sus propios intereses al tener cuidado de qué es lo que sacan al aire. Con los nuevos cambios, todo parece indicar que la sanción se aplicará únicamente al retiro de la publicidad, pero recordemos que una de las cosas que sucedió en las pasadas elecciones es que algunos anuncios publicitarios no llevaban firma, es decir, no sabíamos quienes la habían pagado.
Prediciendo el futuro inmediato, con estas modificaciones seguramente veremos muchas de estas inserciones en los medios de comunicación, al cabo que, puede ocurrir, no habrá a quien sancionar, y para algunos con grandes intereses de por medio, siempre será mejor estar pagando un nuevo anuncio con tal de que ciertas personas se vean perjudicadas.
Quedarán algunas limitaciones para los concesionarios y permisionarios, pero nada que un poco (o un mucho) de dinero y retórica no pueda solucionar, como lo vimos también en las pasadas elecciones. Además, aun no se termina la discusión de los nuevos lineamientos así que las pocas ventajas que la nueva legislación electoral tiene todavía se pueden perder.
Después de todo, el cuarto poder de la nación, es decir, los medios de comunicación, aun tienen mucho que decir.
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